Gracias al
lenguaje, la humanidad ha conseguido lo que tiene hasta
ahora; siendo la comunicación el proceso por el cual el lenguaje se mueve; se
ha creado una gran diversidad de formas de hacernos entender hacia nuestros
semejantes. Probablemente una de las más novedosas es la comunicación digital
que utiliza diversos medios electrónicos para realizarse, siendo el teléfono
móvil el gran icono que representa esta revolución digital-social.
Una pequeña historia.
Hace un par
de días fui testigo de una escena que constaba de dos personajes. Ambos se encontraban platicando de cualquier cosa,
se trataba de un encuentro casual. La
conversación parecía amena, puesto que ambos cordialmente se escuchaban, se seguían el tema y de verdad parecían
disfrutarse. En un momento una aguda pero resonante campana se escucho en el
bolsillo de uno de ellos, y como movido por una urgencia natural sin dejar de
ver a su interlocutor saco un celular de aquellos que los entendidos llaman
“Smartphone” Note una perturbación en la relación entre los dos
personajes, el dueño del celular parecía
decirle con la mirada a su acompañante -
disfruto mucho esta conversación, pero
este teléfono es ahora más importante, con o sin tu permiso…- Al mismo tiempo la persona que se encontraba
hablando pareció confundirse, parecía que dudaba entre seguir su conversación o
dejar que su acompañante revisara la emergencia del celular inoportuno. La
conexión se rompió, el dueño del celular clavo su mirada en el celular, comenzó
a rozar la pantalla y sin apartar la vista en ningún instante de la pantalla de
su teléfono acertó a decir –me llego un
inbox, pero te escucho…- Quien
hablaba, tomo esta aclaración como una invitación y continúo hablando, pero
ahora sin ningún tipo de contacto visual, parecía que no había nada ya en esa
conversación, era demasiado tarde.
Cuando el
usuario del celular termino su respuesta escrita con un sonoro - ya…- y un sobreactuado acto de guardar el
celular en su bolsa, dio a entender que la conversación regresaba a su
naturaleza anterior. Sin embargo en la relación entre ambos comunicadores había
una grieta, era claro que la conversación jamás volvería a su naturaleza
original.
Esta escena
tan común y corriente en nuestra convivencia se ha arraigado con apenas unos
pocos años. Este acto es llamado “Phubbing” un vocablo anglosajón que
evoca las palabras phone y snobbing (que quiere
decir desprecio). Y esto es justamente lo que representa el acto de
abandonar a una persona por el hecho de mandar mensajes de texto o revisar el
celular, ya que finalmente el mensaje es: “lo
que ocurre en mi celular es más importante que tu” Sobre quienes repercute más esta conducta
son a los jóvenes que en muchas de las ocasiones prefieren la comunicación a
distancia o vía texto, que cara a cara.
Las consecuencias del phubbing son
generalmente inmediatas; la persona que lo sufre se siente desplazada e
ignorada, muy probablemente esta persona le hará lo mismo a otras intuyendo que
el acto de darle más importancia al celular es una regla no dicha de
comunicación; se comienza a justificar el acto con el “todos lo hacen, yo
también debería hacerlo” pero las
consecuencias a largo plazo aún son inciertas y las especulaciones van desde la
simple incomodidad social hasta fatalistas predicciones sobre el fin de la
civilización tal como la conocemos. Es por esto que existen algunos activistas
que buscan erradicar este molesto hábito como lo es el denominado movimiento
STOP PHUBBING http://stopphubbing.com/ o la propuesta de ciertos
restaurantes que en busca de una convivencia más abierta y sana en sus recintos
solicitan el depósito de los celulares en un contenedor a cambio de un buen
descuento en la factura de consumo.
Concluyendo,
este fenómeno post moderno se une a un estilo de vida que nos muestra la
paradoja entre crecer socialmente e involucionar en la implicación con nuestros
semejantes, convirtiendo nuestras relaciones interpersonales en algo más
diverso, pero al mismo tiempo menos profundas, el tiempo dará respuestas y
nuevas preguntas.
Participa y
comenta tus opiniones. ¿Qué has sentido al ser ignorado por causa de un
Smartphone?, ¿Qué, será más importante lo que te haya llegado al celular o la
dignidad de la persona que tienes enfrente?
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información interesante y participar en diversas actividades.
Psic. José
Luis Ramírez Esparza
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