Los niños en casa durante las vacaciones

Ahora que estamos en plenas vacaciones escolares nos encontramos con el fenómeno de tener a los niños en casa. Como sucede en la mayoría de los casos los hijos se encuentran de vacaciones, mientras los padres deben de continuar con sus actividades laborales normales, esto quiere decir, que la presencia de los niños en el hogar forzosamente generará nuevos cambios en las dinámicas que se suelen realizar cuando están ausentes y esto conlleva a diferentes cambios psicológicos que expondré a continuación.

Por ejemplo en un estudio realizado en Villahermosa Tabasco por la psicóloga Patricia Carrada Figueroa con adscripción a la Dirección de Salud Psicosocial observo qué el tener  a los niños en casa durante el verano provoca diferentes cuadros de ansiedad, disminuyendo el nivel de tolerancia,  la frustración, bajando también la capacidad de observar las emociones y sentimientos de los demás. En casos más severos de ansiedad se llegan a presentar dolores focales en espalda, en cadera piernas, colitis o bien parálisis faciales. 

Este tipo de trastornos incide directamente con el rendimiento laboral de los padres quienes bajan su productividad o se ausentan de sus ocupaciones. Llegando a suceder el caso de que la vida social activa de los padres prácticamente desaparece por hacerse cargo del cuidado de los niños:"Gran parte de las mamás sufrirá cuadros de estrés por tener a los niños en casa durante las vacaciones de verano, ya que la presencia de los niños provocará crisis de ansiedad, mal humor y dolencias asociadas con la tensión, debido a que por su edad a los niños se les tiene que buscar actividades para evitar estén expuestos al televisor o videojuegos", refirió durante entrevista.

Sin duda aunque los niños traigan frescura y mucha alegría al hogar durante las vacaciones es importante cuidar nuestra salud como padres evitando cumplir todas las demandas que los niños hagan de entretenimiento, sobre todo aquellas mas prescindibles, así como tomar una actitud de terror ante la situación anotándolos a cuanto curso de verano se aparezca o bien dejándolos al cuidado de tíos o abuelos a la menor oportunidad.

 Este tiempo es una oportunidad para mostrar a los hijos nuevas responsabilidades, así por ejemplo, ellos pueden ayudarnos en las labores diarias del hogar dependiendo la dificultad  según su edad se lo permita, recordando que este tiempo es donde los padres tienen más contacto con los pequeños y que todo aprendizaje o experiencias vividas serán entrañables.

Psic. José Luis Ramírez Esparza

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